Errar es humano, perdonar es divino. Y tienes toda la intención de elevar tu espíritu. Querido Escorpio, ha llegado el momento de dejar atrás «de dónde vienes». El dolor, la ira, los enemigos y los acontecimientos que te han anclado al suelo en los últimos años. Sin embargo, no todos los males llegan para perjudicarte: por agotadores y difíciles que sean, te están empujando a emprender un nuevo viaje. Conquistando tú renovada serenidad. Comenzando desde el trabajo, donde ciertas revisiones en el contexto de las colaboraciones son inevitables: si aún no lo has hecho, corta con aquellos que no pueden aportar vida y motivación a tu actividad profesional. Algunos cambios este año serán afortunados, especialmente si deseas dedicarte a actividades o sectores completamente nuevos. Desde finales de febrero, puedes acelerar una inversión reciente o crear una opción de trabajo «innovadora», que para algunos también puede traducirse en un traslado a otra ciudad. Aquellos que perseveran en una posición o relación insatisfactoria, en abril lanzan un aut aut definitivo. La segunda mitad del año es definitivamente mejor, de reconstrucción. Incluso para aquellas parejas enamoradas que sufrieron momentos bastante fuertes entre junio y septiembre. Solo tienes que entender cómo van las cosas entre marzo y abril. Mientras tanto, los solteros, atesorados por mi consejo inicial, pueden dedicarse a un nuevo amor ya en enero. Y luego nuevamente en agosto. La peculiaridad de este año es que cuando Venus está a favor, Mercurio es «rencoroso». Es una advertencia para enamorarse de la persona adecuada y, sobre todo, no complicar la vida con personas ocupadas o exigentes. Posibles mudanzas e hijos para las parejas que se aman. En resumen, este es un año catártico que te enseñará a convertir todo en «luz» lo que ahora parece oscuro. Respira hondo y sumérgete: este es tu bautismo en una nueva vida. ¡Feliz año nuevo!