En este período, Libra parece estar montando un toro de rodeo automático, con la intención de no quedarse atrás. Muchos compromisos, a menudo intercalados con eventos inesperados, (im) probabilidades, rebotes y ralentizaciones. Los autónomos saben algo al respecto, a menudo a merced de negociaciones tortuosas o reclamos absurdos de clientes y contactos. Quienes están lidiando con la entrega inminente de un proyecto, pueden tener la sensación de que no pueden hacerlo: una lucha constante contra el tiempo. Bueno, hemos estado hablando de eso desde hace algún tiempo, pero ahora se convierte realmente en una prioridad: mantenerse en equilibrio requiere una organización de hierro. Se necesita un sistema ordenado, en el que cada engranaje gire bien. Capaz de evitar, cuando sea posible, enfrentar cualquier evento inesperado en el acto. Muchos empleados también experimentan un escenario similar, donde necesitan aclarar mejor su función o no verse recaer en su escritorio horas extra o tareas que no le pertenecen. A partir de esta semana, con el Sol en la casa de la carrera, se habla de un nuevo orden. Especialmente al comienzo de la semana, muchos tirarán el freno a mano del toro mecánico, dictando reglas más firmes y efectivas (de auto organización). Vale la pena imponerse un poco, para mantener el punto, porque más allá del caos y la confusión, este es un período en el que realmente puedes sentar las bases para un sistema mejor. Revoluciones trascendentales en el horizonte, alguien quiere comenzar desde cero.
De vez en cuando, valdría la pena bajar del toro mecánico para dedicar tiempo y energía al amor también. Venus todavía está a favor, y permanecerá allí hasta principios de agosto, dejando en tu cielo oportunidades para nuevos encuentros. Esta semana, por ejemplo, puede ofrecer sorpresas interesantes, especialmente alrededor del miércoles 23 y luego nuevamente el fin de semana: si fuera tú, daría especial atención a los «amigos de amigos». Pero algo me sugiere que, además de mirar a tu alrededor, en este período también estás mirando hacia atrás. De hecho, parece que este es un período de balances y reflexiones. En el que se recuerdan los amores del pasado, con el deseo (vago o concreto que sea) de intentarlo de nuevo. Aquí se debe hacer una distinción. Si hablamos de historias importantes, que con el tiempo se han convertido en algo diferente, pero donde básicamente todavía hay un sentimiento de vida, se puede hacer. Si, por otro lado, es una sensación de soledad que nos empuja a mirar nuestra agenda de ex, es mejor mirar hacia adelante. Porque el deseo de tener a alguien a tu lado puede hacerte tomar decisiones… No digo malas, pero que no aportan mucho. En los últimos tiempos, alguien ha tenido que dedicarle más atención al hogar (entre mudanzas y ventas) o a la familia: en este caso, hay algo en la relación con un «pariente» que no te cierra, y es correcto que tú ahora lo digas. Las primeras soluciones están en el horizonte.