Es un buen momento para llevar a cabo los proyectos e iniciativas que tienes en mente, aunque -como ya dije anteriormente- en la mayoría de los casos es difícil obtener respuestas inmediatas. Tauro busca su consagración: si por un lado tenemos a los que están haciendo reclamos y solicitudes en la empresa, por otro están los que tratan de «reabrir» un camino con un contacto… con quien se tiene una «Deuda de reconocimiento». Esto significa, por ejemplo, volver a la puerta de un antiguo cliente que te debe un favor (o dinero), o que en el pasado ha mostrado interés en tu proyecto pero sin dar seguimiento al trato. Ronda de llamadas telefónicas y acuerdos ya a principios de semana. Tienes que insistir, lo sabes. Pero si algo (en todos estos casos) no funciona, siempre existe la posibilidad de cambio que el «Tauro insatisfecho» lleva tiempo ventilando. En general, en este período prestemos atención a los gastos de la propia actividad profesional o a un cierto clima de impaciencia que podría surgir especialmente el jueves 28 y viernes 29. Para alguien podemos hablar de traslado de grupo o de sede, a veces de ciudad si el trabajo lo requiere.

Es hora de hacer un pequeño análisis de tu situación sentimental. Las parejas que se aman ciertamente no se ven afectadas por algunos tránsitos «molestos», pero también es cierto que debemos dedicar algo de tiempo a la gestión económica. Probablemente se ha gastado mucho dinero en la casa, tanto en términos de renovaciones / reparaciones como de compra y venta. Pero en general, en este período es bueno hacer algunos cálculos también para prever posibles gastos o para no tropezar con gastos innecesarios. En algunos casos, también la familia o el distanciamiento de uno de los dos (por motivos profesionales o personales) podrían traer algunas preocupaciones. Observemos lo que sucede en los días cercanos al jueves 28, cuando la Luna Llena no está en armonía con tu signo. También hay que decir que para determinadas relaciones (sobre todo las que están en crisis o extramatrimoniales) es el momento de sacar todo afuera: que ya no quieres más continuar la relación de esta forma, por eso es importante a este punto que tomes una decisión más clara (incluso pidiendo confirmaciones que puedan ayudarte a tomarla). En otras relaciones, sin embargo, la pregunta es más latente: no siempre se habla de una crisis, que quede claro. Pero es como si existiera una pequeña intolerancia que se gesta cada día que pasa. ¿Aburrimiento? ¿Falta de pasión? ¿Quieres escapar? No cuestiones un amor sólido, seguro. Pero empieza a escucharlo para entender lo que tiene que decirte.