Más que encenderte o enojarte, lo que necesitas es reorganizar la situación laboral actual. Ciertamente, estos tránsitos no ayudan, y te arrojan a una especie de inevitable metamorfosis-reflexión que se llevará a cabo en los próximos meses. Incluso donde recientemente ha habido algo nuevo en el trabajo, una propuesta o una promesa, ahora parece que algo no está a favor. Por lo tanto, es difícil manejarse en el caos, especialmente si tú mismo ya no estás convencido de las cosas que estás llevando a cabo. Por eso mantengamos bajo control los días próximos al martes 27, los más complicados y agotadores de este período. Tú o una persona de contacto pueden dar marcha atrás en un trato. Hay que decir, sin embargo, que, si por un lado es difícil, por otro hay soluciones alternativas o planes a evaluar. Quizás por ahora se trate más de «sugerencias» que de situaciones concretas a realizar. Sin embargo, algo me sugiere que cuanto más pasen las semanas, más estas ideas pueden convertirse en planes para ser realizados. Pienso, por ejemplo, en quienes quieren emanciparse de rol, de una colaboración o de una empresa, porque necesitan moverse de una manera más «independiente». Bueno: algunas ideas ya están en circulación, otras podrían surgir el jueves 29 y el viernes 30. Mi consejo es seguirlas, aunque para realizarlas hay que contar con el apoyo de socios, colaboradores o – en casos más concretos – un miembro de la familia. Cuando quieres hacer «negocios», siempre es mejor compartir el riesgo… ¿no crees?

También en los afectos esta es una semana que sacude el alma. Sobre todo a nivel familiar, hay temas por reorganizar y que durante el martes 27 y miércoles 28 podrían hacerse más evidentes. A veces, es precisamente la complicada relación con un padre o un hijo lo que debe equilibrarse. A menudo, la sensación es la de hablar dos idiomas diferentes, especialmente si el choque se produce entre dos personajes fuertes (y tú de esto, ¡sabes algo!). Pero a este punto diría que «chocar» es la mejor manera de entenderse y encontrar un centro de gravedad común en la relación. Lo mismo ocurre con algunas parejas que aún no han logrado superar una crisis de febrero: a este punto, dado que la intención de ambos es «ir más allá», se decidirá por el bien de la pareja. Algunos proyectos postergados, por motivos económicos o personales, a partir de la semana que viene (y aún más a partir de la segunda quincena de mayo) empezarán a retomar el rumbo gracias a una geografía celeste más favorable y solidaria. Incluso los solteros tienen que esperar un tiempo antes de volver al juego, pero mientras tanto pueden confiar su corazón a alguna pasión o ensueño fugaz alrededor del viernes 30.