Por supuesto, hablar de trabajo ahora puede resultar un poco desafinado, porque la llamada está estrictamente ligada a las responsabilidades típicas del mundo adulto. Sin embargo, hay una manera de aligerar estas cargas, y es precisamente la de seguir una corriente que de alguna manera también te está llevando en diferentes direcciones en comparación con el pasado. Ya se han producido algunos cambios de escenario / rol, otros están en camino. No pospongas para mañana lo que puedes hacer hoy: si una situación en tu campo es «híper-exigente», si hay proyectos que ya no te gusta seguir, intenta hacer una selección. Por el contrario, si aspiras a una meta no creas que es imposible: ¡pruébalo y lo verás! Si tocas las cuerdas correctas de los contactos que importan, sin duda te escucharán.
La primera parte de este año es sin duda la más propicia para empezar con un nuevo proyecto, o un cambio que llevas tiempo persiguiendo. Entre otras cosas, alguien vuelve a retomar un antiguo «amor» profesional, como una iniciativa del pasado o un antiguo contacto con el que volver a colaborar. Y hablando de amor… en el 2021 es posible que hayas sufrido determinadas decisiones del otro o hayas forzado una situación que tenía que ir en otro sentido. Si recuperas tu centralidad, tus deseos, tu vida, ahora será más fácil relacionarse, sin sentirse «víctimas» de un desequilibrio. Para los solteros (pero no solo) este año hay muchos «planetas» que salpican su cielo… especialmente para esos «locos» que en cierto sentido recuerdan el lado infantil. Entonces, dejémonos llevar, sobre todo entre enero y febrero, que son los meses del amor.