Si tienes una personalidad ambiversa, lo primero que debes hacer es ir a ver los valores asociados con el Sol y el Ascendente. Si ambos tienen la misma polaridad, esa es la que levemente prevale sobre la opuesta. Si el Sol es introvertido y el ascendente extrovertido, eres más reservado de lo que pareces externamente. Si, por el contrario, el Sol es extrovertido pero el ascendente introvertido, tienes una naturaleza más abierta, pero tus actitudes no siempre son capaces de expresarlo externamente.
También puede ser interesante verificar cuales son los elementos dominantes que están en la carta natal. Si el Fuego prevalece, eres más apasionado, enérgico, emprendedor. Si el aire prevalece, eres más mental, teórico y comunicativo. Si la Tierra prevalece, eres más concreto y pragmático. Si el Agua prevalece, eres más emocional e imaginativo. Si incluso estos son pares (o casi), ¡eres una «balanza» en perfecto equilibrio!