¡VENUS EN LA CASA PARA GÉMINIS!
(del 23 de junio al 18 de julio de 2022)
¡Bienvenido de nuevo Venus en el signo! ¡Era hora! ¡Oh sí! ¡Porque las reinas y los reyes de la fiesta, durante las próximas semanas, son justo los de Géminis! En primer lugar, Venus en el signo es un baño de luz que aumenta el encanto, la belleza, el carisma y la autoestima. Y en muchos casos había una gran necesidad de ello, pues son muchas las dificultades de estos primeros meses del año (relacionadas tanto con el trabajo como con el ámbito de los sentimientos) que en muchos casos han puesto una presión sobre la confianza en uno mismo. Ahora llegan los refuerzos: tanto a nivel interno como en el frente de las relaciones interpersonales, las cosas comienzan a girar mejor un poco a 360°.
Pero la llegada de Venus también puede marcar realmente el comienzo de una nueva temporada para el corazón, hecho de nuevas emociones, encuentros y amores a primera vista. Venus despierta el deseo de estar entre otros y de ampliar el círculo de conocidos. Entre otras cosas, el Cielo de Géminis también alberga a Mercurio por lo que la esfera de contactos encuentra cierto dinamismo, también a través de las redes sociales. Tírate a la pileta, déjate ver por ahí, mantén un ojo abierto en las nuevas «amistades» porque pueden mostrar lados más románticos. Después de todo, con Júpiter y Marte a favor, ¡el espíritu de iniciativa ciertamente no falta! De hecho, este cielo también puede dar el «empujón» correcto a aquellos que ya tienen un interés en el corazón, pero que aún no han encontrado el coraje para «declararse».
Incluso para aquellos que están en pareja, la llegada de Venus marca el comienzo de una fase más serena y relajada después de una primera parte del año bastante turbulenta. Especialmente para aquellos que tienen pareja de Virgo, Sagitario, Piscis o Géminis no fue fácil encontrar un centro común de metas. En muchos casos, también por ofertas de trabajo que apuntaban a otras ciudades, o proyectos que no encontraron a ambos de acuerdo. Ahora empiezan a hablar el mismo idioma. Vuelven las ganas de mirar hacia el mismo lado, remar hacia los mismos objetivos y volver a sentirse como una «pareja».