Los primeros en beneficiarse de este tránsito son por supuesto los Signos de Agua (Cáncer, Escorpio y Piscis), por lo que podemos decir que este año la temporada se cierra con mucho romanticismo, con un cielo finalmente más claro, sereno y sin preocupaciones. En las próximas semanas, Venus favorece las oportunidades de encuentro y crea las condiciones adecuadas para abordar y resolver los problemas y cuestiones  familiares. Venus trae la luz de un nuevo encanto, aumenta la autoestima y la confianza en uno mismo.

Para Cáncer en particular, comienza un período que verdaderamente puede bautizar un nuevo amor importante. Para Escorpio, en cambio, los encuentros más interesantes llegan mientras viaja, con personas de otras ciudades o en todo caso fuera del círculo de los conocidos habituales. Incluso para quienes ya están en pareja, crece el deseo de hacer más, de fijarse nuevas metas y de pensar en plural. Y para quienes lo deseen, existe el cielo adecuado para preparar  un bebé (en muchos casos incluso después de varios intentos fallidos).

En especial, Piscis y Virgo dejan atrás una cuadratura de Venus que en las últimas semanas puede haber creado un clima un poco tenso y agotador en el amor. Las situaciones fueron múltiples. Pienso en las parejas más recientes (que surgieron en los primeros meses del año) que en mayo enfrentaron un período de dudas e incertidumbres. O distancias (especialmente si se trata de personas de otras ciudades). Pero también pienso en las parejas más sólidas, donde ciertamente no se han cuestionado los sentimientos pero que en todo caso pueden haber pasado por un período de mayor nerviosismo, en el que era más difícil comunicarse o hacer coincidir compromisos.

Por no hablar de las parejas que han entrado en el corazón de esta temporada con una crisis que ya había empezado desde hace tiempo. En este caso, la cuadratura de mayo puede haber creado un clima más pesado con la sensación de estar en un importante campo de prueba. Y cerramos con los solteros de estos dos signos, que recientemente se sintieron víctimas de un hechizo por el que nadie se acercó a ellos. O como mucho sólo se acercaron «casos raros». En todas estas situaciones, es apropiado decir «¡Venus lo libera todo»! El planeta del amor pasa de un aspecto hostil a una posición favorable y la música cambia. ¡Para mejor! (continua…)