¡Feliz Navidad, Libra! La vida profesional está en movimiento, incluso si algunos han venido aquí con los bolsillos medio vacíos. Sin embargo, la buena noticia, como sabes, es que Júpiter y Saturno ahora están de tu lado. Por eso, también a la vista del 2021, es importante manejar todas las situaciones que creas que están en línea con tus aspiraciones. Algo hermoso podría «explotar» en tus manos en cualquier momento, por eso es importante estar preparados. Pero te toca a ti encender la mecha de un acuerdo, una solicitud, una nueva colaboración o un proyecto porque, como suelo decir, no todo viene del cielo. Mientras tanto, a partir de esta semana el Sol y Mercurio en cuadratura te ponen en pausa, pero dado el periodo (que todos estamos pasando) diría que también puedes desconectarte para descansar. Sin embargo, quienes permanezcan activos en los primeros días de esta semana, entre el martes 22 y el miércoles 23, pueden experimentar una “confrontación” (en ocasiones encendida) con una persona de contacto que ayuda a delinear el rumbo de una situación futura.

Será el aire navideño, serán las ganas de tener a alguien cerca, pero para los solteros es imposible no sentir este despertar del corazón. Algunas oportunidades nuevas pueden haber aparecido ante tus ojos en los últimos días, pero esto, a veces, no es suficiente para decir «¡sí, esa es la persona adecuada!». Quizás (después de algunas decepciones recientes) hayas aumentado las apuestas, pero a veces se le da más espacio a la razón que al sentimiento. Estamos solo en el preludio de un nuevo año que tiene la prerrogativa de devolver el amor a tu vida. Estoy de acuerdo contigo en no tener prisa, pero trata de no excluirte a caminos o personas que puedan decirte algo en relación al corazón. Mercurio torcido no facilita los primeros acuerdos, pero tú intenta ir más allá. Algunas pequeñas tensiones o enfrentamientos caracterizan las jornadas cercanas al martes 22, también por asuntos familiares. Mucho mejor la segunda parte de la semana, especialmente el domingo 27 para vivir emociones especiales, pero también para echar semillas de proyectos al futuro de la pareja.