Como decía antes, en una especie de Árbol que representa nuestra vida, el Medio Cielo corresponde a las ramas más altas, las más prominentes, las que más encarnan el anhelo de acercarse al cielo. Mientras que el punto opuesto (el Fondo Cielo, al cual pronto dedicaré una publicación) representa las raíces. Los dos puntos representan los extremos de un solo eje, como prueba del hecho de que uno inevitablemente interfiere con el otro. Mi «raíz» dirá mucho sobre mi «evolución«, que a su vez está estrechamente relacionada con las raíces. Quizás es por eso que a menudo, cada vez que nos enfrentamos a una importante prueba / oportunidad de trabajo (un examen, un proyecto, un debut), a menudo la familia exige más atención. Porque de alguna manera, las raíces y el follaje están estrechamente conectados y, uno de los mayores desafíos en la vida es equilibrarlos. Si la balanza cuelga demasiado del lado de las raíces, ciertamente estaremos más «seguros», protegidos por el cerco de la zona de confort, pero también demasiado anclados al suelo, abandonando nuestro camino. Si, por el contrario, la balanza se inclina demasiado hacia las hojas, probablemente invertiremos casi toda nuestra energía en nuestro crecimiento personal y profesional, pero a cierto punto podemos sentirnos «desarraigados», no «pertenecer» a nada ni a nadie. El eje Fondo Cielo – Medio Cielo es un poco como el hilo de una cometa. Si es demasiado corto, la cometa no volará. Si es demasiado largo o, incluso si se rompe, la cometa vuela alta, muy alta pero, corre el riesgo de perderse. Encontrar la longitud correcta de ese hilo, el equilibrio correcto entre la familia y la carrera, entre las raíces y las ramas, es una de las misiones más hermosas y exigentes de la vida.
Lentamente, estamos construyendo un «mapa» de los puntos cardinales más importantes:
• El Ascendente, que describe el enfoque de la vida y de las novedades, nuestro sentido de iniciativa e inventiva y, todo el conjunto de actitudes con las que nos colocamos hacia lo que nos rodea. En una palabra: el carácter.
• El Descendiente, que describe la actitud en las relaciones, en primer lugar la relación de pareja; qué tipo de compañero buscamos, no necesariamente descrito por el signo en el que cae el Descendiente, aunque a menudo sea así; el tipo de comportamiento que tomamos cuando estamos en una relación, y así sucesivamente.
• El Medio Cielo, entendido como la dirección de nuestra realización «pública», el camino por el cual alcanzamos el éxito. Naturalmente, el éxito «centrado», el que representa la mejor realización del potencial expresado por la «firma celeste» descrita en el tema natal. Pero no se ha acabado. ¡Hay un cuarto y último punto cardinal que completa la imagen! ¡Pero lo veremos en el próximo episodio! ¡Y luego también veremos lo que significa tener el Fondo del Medio Cielo y el Cielo en los distintos signos! En resumen, ¡tenemos tanto de qué hablar!
¡Un abrazo a todos!
¡A la próxima!
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