MERCURIO EN RETROMARCHA – SIGNO POR SIGNO

LEO: Mercurio (retrógrado) en la casa del diálogo puede empujarte a enfrentarte a un discurso que en este período quizás te ponga en dificultades o te genere alguna incomodidad. Puede ayudarte a encontrar las palabras adecuadas o crear las mejores circunstancias para hacerlo. En algunos casos, el discurso trata sobre el trabajo y refleja un deseo profundo de ser valorado. Con Júpiter y Saturno en oposición, esfuérzate por no ir más allá de los límites que te impone tu rol y de solicitar solo lo que te corresponde (según criterios objetivos): en la mayoría de los casos, puedes lograr mucho.

VIRGO: «Haz que te paguen«, dice este cielo, señalando con el dedo todas aquellas situaciones que no te valoran como te mereces en cuanto a remuneración. Es el momento de pedir ese ajuste salarial que acumulas desde hace tiempo, el reconocimiento de esas horas extraordinarias de las que te escondes. O, para los autónomos, dar ese recordatorio, «pellizcado» que algunos clientes necesitan para poner mano en sus billeteras. Cuesta esfuerzo, sobre todo para un signo como el tuyo que odia pedir, pero muchos se irán el mes de octubre con una estructura económica recuperada.

LIBRA: Mercurio, Marte y el Sol en el signo estimulan una serie de iniciativas que tocan de cerca la imagen personalde Libra, la forma en que es percibida por quienes lo rodean, desde su entorno. Y lo empujan a lucir más, a aumentar su visibilidad, a reclamar un papel más central como pareja o en el trabajo. Lo empujan a «salir a la luz», a decir «ahora es mi turno, yo también estoy aquí» después de años pasados ​​entre bastidores, a la sombra de otra persona. De alguna manera, hemos llegado al último asalto de una batalla (sobre todo interna) que tiene que ver con su protagonismo.

ESCORPIO: Este cielo te empuja a liberarte de algunos recuerdos que surgen del pasado y que pueden pesar sobre el presente. Pueden ser malas experiencias, amores que nunca se resuelven por completo. Estas pueden ser viejas decepciones en el trabajo, que en algunos casos incluso se remontan a los años con Saturno en el signo (2012/2015). No sucede necesariamente de nuevo, ¡todo lo contrario! – y no debemos influenciarnos. Debemos dejarlos, sacudirnos lo que ha sido y mirar hacia adelante. (continúa)

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