En este momento estás satisfecho a media. De hecho, hay quienes continúan esta etapa profesional sin mayor ímpetu, y por lo tanto esperando que la situación mejore, y quienes en cambio -tras fuertes contrastes o confrontaciones de las últimas semanas- están pensando en cambiar de página con algo nuevo. En ambos casos, sin embargo, es necesario esperar a que el cielo traiga alguna novedad, porque no es el momento adecuado para enojarse. El día del lunes 14 (con la Luna Nueva en cuadratura) te pone frente a ciertas cuestiones laborales, pero más que actuar te aconsejaría que reflexionaras, incluso pensando en cómo reconstruir tu figura profesional o las relaciones con ciertos colaboradores que en cualquier caso no son para «desechar». Así que no sobrecalientes tu estado de ánimo si esta es tu intención al comienzo de la semana. Como dije la semana pasada, algo que surja estos días tendrá su evolución positiva entre marzo y junio. Si a mitad de semana hablas de proyectos futuros con tus contactos, de posibles revisiones o lo que sea, no te equivocas. En este momento, lo único que podemos hacer es poner en marcha proyectos y programas para el 2021. A partir de la semana que viene, el Sol y Mercurio vuelven a estar a favor: el período navideño se puede utilizar precisamente para entender hacia dónde quieres ir.

Si tu corazón dice «Te amo» y tu cabeza «Te odio», hay un problema. Nada irresoluble, por el amor de Dios. Pero en este período entre la razón y el sentimiento necesitamos encontrar un punto de encuentro. También si Venus ayuda con su posición torcida…, pero no hay mal que por bien no venga: quizás esto pueda ayudar a aclarar ciertos puntos de vista con la pareja, o a restablecer el orden con una persona que a su vez dice «te amo», pero se comporta en sentido contrario. Como siempre, está el diálogo que viene a tu rescate… y por eso evita estar de mal humor por semanas o vivir con expectativas (esperando que el otro se mueva). Si puedo darte un consejo, terminemos las vacaciones antes de tomar decisiones arriesgadas. Entonces, por supuesto, depende de las situaciones y de cómo reacciona el otro a algunas de tus «provocaciones». El comienzo de la semana puede ponerte bastante nervioso, cuenta hasta diez antes de decir o hacer algo. En las parejas estables, obviamente, los sentimientos no se cuestionan, pero podría ser obra de uno de los dos lo que crea cierta distancia. Quizás alguien no se sienta «comprendido» por algunas elecciones recientes, o es el trabajo en sí el que se aleja geográficamente. Para los solteros la jornada del domingo 20 es interesante en cuanto a nuevos encuentros, aunque por el momento no nos lanzamos por desconfianza o complicaciones obvias desde el primer «¡hola, gusto en conocerte!».