Discurso aparte merecen TAURO y ESCORPIO quienes, al igual que Leo, tendrán a Venus y Marte en una posición «dinámica» en las próximas semanas. En este caso, estamos hablando de una cuadratura, un aspecto que muchas veces tiene el sabor de un desafío, de un impulso que sirve para producir una «(re)acción». Para TAURO, con Venus y Marte en la Décima casa, el «desafío» podría ser un aumento de responsabilidades en la pareja. Desde una invitación a subir el listón y pasar al siguiente paso en la relación. En algunas parejas podemos empezar a hablar de «ponernos serios», de irnos a vivir juntos, de pensar en un matrimonio o en un hijo. Quienes viven una relación que aún está en pañales, podrían encontrar una pareja que les pida más presencia, mayor compromiso. O, en las historias a larga distancia, podría crecer la necesidad de encontrar una «base», un terreno común. Y lo mismo pasa, por supuesto…

… por otro tipo de «obstáculos» en una nueva relación, más aún si uno de los dos ya está comprometido. Aquí se puede ver todo el sentido del «desafío» de la cuadratura: si crees en ello, sigue tu camino. Reúne la fuerza de tu convicción y salta el obstáculo. Aceptas de pasar a la fase siguiente. De lo contrario, si llevas tiempo albergando una duda latente, indistinta, es precisamente en el momento de la cuadratura cuando ves con mayor claridad y sobre todo estás llamado a enfrentar la situación directamente. En cierto modo, las cuadraturas siempre me han hecho pensar en cruces de caminos. Mientras el cruce de caminos esté lejos, puedes permitirte el lujo de la indecisión: ¿voy a la derecha o a la izquierda? Sin embargo, cuando la encrucijada está frente a ti, se vuelve más urgente decidir a dónde ir. Las cuadraturas suelen tener una naturaleza similar: señalan que es hora de decidir o tomar una posición más definida.

Algo así tiene que ver con ESCORPIO, para el cual Venus en Acuario también podría acentuar cierta «desconfianza» en las relaciones. Por el amor de Dios, nada que pueda afectar a las parejas más “sólidas” pero te doy un consejo: si tienes a un Escorpio a tu lado, en este periodo evita decirle mentiras o medias verdades. Con todas estas cuadraturas, podrían socavar los cimientos del castillo de confianza. Claramente, en las relaciones más recientes, esta sensación de desconfianza està más pronunciada que nunca. Es como si Escorpio necesitara más de lo habitual para entender exactamente quién está frente a él. Incluso a costa de someterlo a alguna pequeña «prueba» para ver cómo (re)actúa. Abordar un discurso de frente, o buscar otra forma de despejar una duda. ¡Escorpio es el «detective» del Zodíaco y siempre se encuentra la manera de arrojar luz sobre una situación poco clara!

Venus en Acuario, en el cielo de Escorpio, también puede activar una serie de discursos sobre la casa. En este período, la «obra» doméstica está en pleno apogeo. Hay quienes están luchando con una renovación, con una modificación de los espacios (quizás de cara a la llegada de la cigüeña), que pronto se enfrentarán a una mudanza o a un traslado. Hay parejas más jóvenes que se enfrentan al tema de una primera convivencia, y parejas de larga distancia que buscan la forma de reencontrarse. Todas maniobras que sin duda generan cierto esfuerzo, pero que tienen el sentido de reforzar los cimientos. La de una primera convivencia es naturalmente una prueba importante para dos personas que están juntas. Y aquí entra en juego el poder de la cuadratura (que, recuerdo, es un «desafío»). Si uno de los dos no está del todo de acuerdo con ese paso, Venus proporciona el empujón correcto para voltear las cartas y hablar de ello abiertamente. (continúa)