Si para definir una situación particularmente complicada surge la necesidad de lidiar con una disputa, no retrocedas pero tampoco la arrastres más allá de lo necesario. En algunos casos, una buena mediación es mejor que una guerra sin fin. En este sentido, este también es el año adecuado para quienes están a la espera de definir un divorcio (el propio o el de su pareja) para poder volver a casarse. Este es un año que pide «justicia» incluso en todas esas situaciones emocionales que aún no han encontrado el lugar que les corresponde: quienes han sido novios eternos ahora también pueden esperar un matrimonio. Junio es el mes del amor. Las mismas son las necesidades para los solteros con los nuevos encuentros: a partir de ahora las cosas se hacen seriamente.
Júpiter en oposición, en mi opinión, crea soluciones. Porque le da a Virgo el empujón adecuado para actuar, para poner en orden las energías y revolver las aguas. Decir «no» a todo lo que has aceptado en el pasado sin encontrar fuerzas para reaccionar. Si tuviera que usar un «adjetivo» para describir este giro, lo llamaría «épico». Épico como el gesto de Espartaco que rompe las cadenas y lidera la rebelión. Muchos «ahora basta», pero también muchas iniciativas que tomarás este año estuvieron allí en tu cielo desde hace tiempo. Solo esperaban el momento (fuerza, determinación, orgullo) para que se pronunciaran. Y entonces, querido Virgo, ha llegado ese momento … ¡es el momento!